En el contexto del Día Nacional de la Lucha contra el Cáncer de Próstata, un tema crucial que surge es el impacto significativo de la obesidad en la salud masculina, particularmente en la función sexual y reproductiva. En México, un porcentaje alarmante de hombres presenta sobrepeso (40%) y obesidad (31.5%), según datos de la ENSANUT 2018-19. Estas condiciones, además de aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares y metabólicas, están estrechamente vinculadas con problemas sexuales, reproductivos y oncológicos.
El Dr. Jerónimo Monterrubio, cirujano bariatra certificado por el Colegio Mexicano de Cirugía para la Obesidad y Enfermedades Metabólicas AC, enfatiza la importancia de abordar el sobrepeso y la obesidad en los hombres, no solo por su figura y bienestar general, sino también por las graves implicaciones en su salud sexual y reproductiva. Entre los riesgos específicos se encuentran la disfunción eréctil, el hipogonadismo (déficit de testosterona y/o espermatozoides), la infertilidad y el cáncer de próstata.
Un metaanálisis que incluyó a más de 2,5 millones de hombres reveló que por cada incremento de cinco puntos en el Índice de Masa Corporal, el riesgo de morir de cáncer de próstata aumentaba en un 10%, y cada 10 cm adicionales en la cintura elevaba el riesgo en un 7%. Además, la Organización Mundial de la Salud estima que la infertilidad afecta a 186 millones de personas en todo el mundo, siendo la masculina responsable de más de la mitad de los casos de falta de hijos.
El Dr. Monterrubio resalta que la obesidad es un factor de riesgo modificable y que su manejo adecuado puede mejorar la función eréctil, los niveles de testosterona, la fertilidad y reducir el riesgo de cáncer de próstata. El Programa Allurion, que combina orientación nutricional y actividad física personalizada con cambios de comportamiento a largo plazo, es una opción innovadora en este ámbito. El programa incluye el uso temporal de un balón gástrico ingerible y herramientas tecnológicas basadas en inteligencia artificial, proporcionando una pérdida de peso saludable y sostenible.
Este enfoque integral ha demostrado ser exitoso en más de 100 mil personas a nivel mundial, con pacientes perdiendo en promedio del 10% al 15% de su peso corporal total en aproximadamente 16 semanas. Además, en el 96% de los casos, la pérdida de peso se mantiene 12 meses después de haber eliminado el balón gástrico.
El Dr. Monterrubio concluye que este programa brinda soluciones inclusivas y personalizadas, reconociendo los desafíos y objetivos únicos que enfrentan los hombres en su viaje hacia la pérdida de peso y un mejor estado de salud general.