Investigadores han realizado un descubrimiento sorprendente al encontrar agua en la superficie de dos asteroides, aprovechando datos de una misión de la NASA que ya ha concluido. Este importante hallazgo proporciona nueva información sobre la distribución y evolución de los materiales en el espacio, así como sobre la formación de agua en la Tierra y su potencial para indicar la habitabilidad en otros sistemas solares.
El estudio, liderado por el Southwest Research Institute, reveló que la existencia de agua en estos cuerpos celestes fue detectada gracias al Observatorio Estratosférico de Astronomía Infrarroja, un proyecto conjunto de científicos de la NASA y la Agencia Espacial Alemana en DLR.
Anteriormente, los científicos habían identificado la presencia de hidrógeno en estos asteroides, pero no podían distinguir entre agua y su pariente químico más cercano, el hidroxilo. La investigación, dirigida por Anicia Arredondo, se centró en cuatro asteroides ricos en silicato, de los cuales dos mostraron la presencia de agua molecular en su superficie.
Estos hallazgos ofrecen una visión más clara sobre cómo los materiales en el espacio se distribuyeron y han evolucionado con el tiempo. Según Arredondo, los asteroides son remanentes del proceso de formación planetaria y su composición varía según su origen en la nebulosa solar.
Este descubrimiento no solo arroja luz sobre el origen del agua en la Tierra, sino que también podría proporcionar pistas sobre su distribución en otros sistemas solares, lo que a su vez podría orientar la búsqueda de vida extraterrestre. Además, se comparó este hallazgo con descubrimientos anteriores de agua en la Luna, sugiriendo que la abundancia de agua encontrada en los asteroides está en línea con la encontrada en el satélite natural de la Tierra.
El estudio continuará expandiéndose con la intención de estudiar otros 30 objetivos para aumentar el entendimiento de la distribución de agua en el sistema solar. El equipo utilizará el Telescopio Espacial James Webb para investigar algunos de estos objetivos, lo que podría revelar aún más sobre los misterios del agua en el espacio.
La importancia de estos hallazgos trasciende la mera comprensión científica de la distribución del agua en nuestro sistema solar, ya que también tiene implicaciones significativas para la búsqueda de vida más allá de la Tierra.
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