vulnerabilidades en las redes educativas
Redactor: Daniel Lee
El sector educativo en México se encuentra en alerta máxima debido al aumento significativo de ataques cibernéticos en los últimos años.
Según un informe de la empresa especializada en seguridad informática iQSEC, una decena de instituciones educativas, tanto públicas como privadas, han reportado ser víctimas de estos ataques. Los estados más afectados por esta creciente amenaza son Sinaloa, Chiapas, Nuevo León, Jalisco y Ciudad de México.
La problemática no se limita a México, ya que a nivel global, las instituciones educativas están siendo blanco de ataques cibernéticos. De acuerdo con iQSEC, alrededor del 80 por ciento de las instituciones de educación en todo el mundo han sufrido ataques de ransomware en el último año.
Este tipo de malware o código malicioso bloquea el acceso a equipos y sistemas infectados, a menudo exigiendo un rescate para su liberación.
Manuel Moreno Liy, director de Habilitación de Ventas de Seguridad, explicó que los centros educativos son objetivos atractivos para los cibercriminales debido a la falta de medidas de seguridad adecuadas. Además, estas instituciones suelen tener una amplia gama de usuarios en sus redes, que incluyen estudiantes, profesores, administradores, egresados y proveedores externos, lo que amplía las oportunidades de ataque.
El informe de Sophos "El estado del ransomware en el sector educativo 2023" señala que la principal amenaza que enfrentan las escuelas es el secuestro de información, y revela un aumento de más del 20 por ciento en los ataques de ransomware de 2022 a 2023. Los principales puntos de intrusión incluyen el robo de credenciales y la explotación de vulnerabilidades en sistemas informáticos.
Moreno Liy destaca que estos ataques a menudo se producen porque los miembros de las instituciones educativas utilizan los sistemas internos para acceder a redes sociales y plataformas de mensajería a través de dispositivos que pueden no estar monitoreados o carecer de antivirus de última generación.
Ante esta creciente amenaza cibernética, el sector educativo en México y en todo el mundo enfrenta la urgente necesidad de fortalecer sus medidas de seguridad y concienciar a su comunidad sobre las mejores prácticas de ciberseguridad.
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