Redacción Frida
Las autoridades sanitarias estadounidenses han llegado a una conclusión impactante sobre un ingrediente clave presente en muchos medicamentos para el resfriado y la gripe: esencialmente, no tiene efecto. Además, su alternativa, la pseudoefedrina, está siendo escrutada en Europa por posibles riesgos para el cerebro.
En España, se comercializan alrededor de seis millones de cajas al año de descongestivos nasales basados en la fenilefrina. Sin embargo, la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA) ha determinado que esta sustancia no es más eficaz que un placebo en el tratamiento de los síntomas del resfriado.
El profesor Randy Hatton de la Universidad de Florida señala con consternación que se acercan a "los 2000 millones de dólares anuales en ventas de un producto que no funciona". Mientras tanto, la Agencia Española del Medicamento predice que, ante tales hallazgos, la Agencia Europea del Medicamento (EMA) tendrá que revisar este asunto pronto.
El uso de fenilefrina ganó popularidad en los EE.UU. después de que una ley de 2006 limitara la disponibilidad de pseudoefedrina debido a su potencial uso ilegal en la producción de metanfetamina.
La alternativa a la fenilefrina podría ser la pseudoefedrina, pero la EMA actualmente está investigando este compuesto, en particular por los riesgos asociados con enfermedades que afectan a los vasos sanguíneos del cerebro.
Ambas sustancias, fenilefrina y pseudoefedrina, están diseñadas para contraer los vasos sanguíneos y aliviar la congestión nasal. Pero Mark Dykewicz, de la Universidad de Saint Louis, sostiene que solo uno de estos medicamentos es efectivo. El hígado descompone rápidamente la fenilefrina, y solo el 1% llega a la nariz, lo que lo hace ineficaz. En contraste, la pseudoefedrina tiene un mejor mecanismo de acción.
Aunque la pseudoefedrina es eficaz como descongestionante, su relación química con la metanfetamina la ha puesto en una posición complicada en EE.UU. Ha sido relegada detrás del mostrador en las farmacias debido a la facilidad con la que puede convertirse en drogas ilegales.
Ambos compuestos, si se toman correctamente, se consideran generalmente seguros. Sin embargo, la pseudoefedrina puede presentar riesgos, especialmente para aquellos en alto riesgo de ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares. Hatton y Rank sugieren que los pacientes consideren remedios alternativos.
Para aquellos que buscan alternativas más seguras, los expertos recomiendan enjuagues salinos, asegurándose de utilizar agua destilada o hervida. La congestión típica del resfriado común eventualmente desaparecerá por sí sola con suficiente líquido y descanso.