Una devastadora secuencia de eventos relacionados con el cambio climático ha tenido un impacto devastador en la reproducción y migración de la mariposa Monarca (Danaus plexippus) a lo largo de México, Estados Unidos y Canadá durante la temporada 2023-2024.
El declive en la población de mariposas Monarca, que hibernan en los bosques de oyamel en el centro de México, ha sido alarmante. Según datos de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP), la población se desplomó en un 59.3 por ciento con respecto a la temporada anterior, ocupando solo 0.90 hectáreas en comparación con las 2.21 hectáreas ocupadas el año pasado. Este descenso representa la segunda caída más dramática en los 31 años de monitoreo de esta especie.
Especialistas de los tres países afectados explicaron que las variaciones climáticas, especialmente en las zonas de reproducción en Estados Unidos, provocaron temperaturas más elevadas y sequía. Esto resultó en una menor disponibilidad de algodoncillos o asclepias, las plantas fundamentales para la reproducción y alimentación de las larvas de las mariposas, lo que condujo al declive casi del 60 por ciento de la población.
Unidos, señaló que las condiciones climáticas desfavorables limitaron la capacidad de la población para crecer este año, lo que conllevó a cifras más bajas en términos generales. Asimismo, resaltó que una combinación de factores, incluyendo condiciones de primavera y reproducción secas y calurosas, así como un otoño poco favorable, contribuyeron a este declive, posiblemente impulsado por el cambio climático.
La pérdida de algodoncillo en el sur de Estados Unidos, debido al uso de herbicidas, ha sido históricamente una amenaza para las mariposas Monarca. Aunque se han realizado esfuerzos de conservación para restaurar esta planta, los resultados aún no son los deseados.
Expertos también han destacado la necesidad de intensificar las medidas de conservación, manejo sustentable y restauración en otras Áreas Naturales Protegidas de la Región de la Monarca para mantener la migración e hibernación de estas mariposas.
En medio de estos desafíos, el gobierno federal ha tomado medidas para conservar este fenómeno migratorio, incluida la disminución gradual del uso del glifosato en México para aumentar las poblaciones de polinizadores, entre los que se encuentra la mariposa Monarca. Sin embargo, la lucha contra el cambio climático y sus efectos adversos sobre esta especie emblemática continúa siendo una prioridad urgente para la conservación de la biodiversidad.