Redacción: Joel Charles
Según el último informe global presentado por la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la tasa de desempleo en Latinoamérica y el Caribe ha experimentado una reducción de tres décimas en el año 2023, alcanzando el 6,7%. Estos resultados sitúan a la región por debajo de los niveles previos a la pandemia (8% en 2019), lo que representa un avance significativo.
Latinoamérica se ha destacado como una de las regiones que ha logrado igualar o incluso mejorar los niveles de desempleo anteriores a la crisis sanitaria, junto con el sur y sureste asiático, así como Europa. Sin embargo, a pesar de esta tendencia positiva, los jóvenes de la región siguen enfrentando desafíos en el mercado laboral.
El informe de la OIT revela que la tasa de desempleo promedio en América Latina continúa siendo una de las más altas a nivel mundial. Solo es superada por regiones como el norte de África (11,2%), los estados árabes (9,3%) y Asia Central y Occidental (7,8%). Esta situación pone de manifiesto la importancia de abordar las necesidades específicas de los jóvenes en el mercado laboral.
Durante la pandemia, la región latinoamericana sufrió grandes pérdidas en términos de empleo, especialmente entre los jóvenes, quienes a menudo se encuentran en situaciones de trabajo informal. Si bien se ha logrado una recuperación en general gracias a las políticas activas de los gobiernos y a la movilización de recursos para apoyar el mercado laboral y a las familias más vulnerables, persisten dudas sobre la calidad de esta recuperación.
El director de Políticas Laborales de la OIT, Sangheon Lee, ha enfatizado que se ha observado un resurgimiento del empleo informal en muchos países latinoamericanos, lo que plantea interrogantes sobre la sostenibilidad y estabilidad de los empleos disponibles para los jóvenes.
Aunque la OIT no proporcionó cifras absolutas de desempleo juvenil en la región, considerando que la población activa en Latinoamérica supera los 300 millones de personas según el Banco Mundial, es evidente que los jóvenes representan una proporción significativa de los desempleados en la región, con cifras que podrían superar los millones.
Si bien el informe destaca la mejora general en el mercado laboral latinoamericano, es crucial continuar enfocándose en la situación de los jóvenes. Ellos enfrentan desafíos particulares al buscar oportunidades de empleo digno y estable. Es necesario implementar políticas y programas específicos que promuevan la inserción laboral de los jóvenes, brindándoles acceso a la educación, capacitación y emprendimiento, así como fomentando la creación de empleos formales y de calidad.
En pocas palabras, Latinoamérica ha experimentado una reducción en la tasa de desempleo en el año 2023, pero los jóvenes siguen enfrentando obstáculos en su búsqueda de empleo. Se requiere una atención continua para mejorar su situación en el mercado laboral y garantizar su inclusión plena en la economía de la región.